
Banco Popular.
1ª Sentencia Ganada
A las 0:00 horas del 25 de noviembre 2015, una nueva bomba financiera habrá estallado en España. En ese momento, más de 35.000 clientes del Banco Popular se convertirán en accionistas de la entidad, con unas abultadas pérdidas en sus cuentas de ahorro.
Son los propietarios de los bonos subordinados necesariamente canjeables del Banco Popular, más conocidos como bonos convertibles, que se vendieron entre los clientes habituales de la entidad en 2009, por un importe de 700 millones de euros y cuya fecha inicial de vencimiento, en octubre de 2013, fue ampliada en una segunda versión de los bonos lanzada en 2012, hasta el 25 de noviembre de 2015.
Las pérdidas se derivan de que el precio de conversión de la acción está fijado en 17,69 euros, cuando su cotización actual no llega a los 3,63 euros.
Una opción es quedarse con las acciones y esperar a que se revaloricen, pero lo cierto es que es casi imposible que mejoren el 80% necesario para compensar la inversión inicial.
Además, los expertos advierten de que si se conservan las acciones en algunos casos se puede entender que el inversor acepta el riesgo que conlleva ser accionista y puede jugar en su contra a la hora de una demanda favorable a recuperar el dinero.
Tampoco el banco está dispuesto a volver a ofrecer soluciones salomónicas. "No hay prevista ninguna solución generalizada para los afectados. El día 25 se hará el canje obligatorio de los bonos por acciones y luego cada caso será tratado individualmente",
Como es de imaginar, nadie firmó este ruinoso negocio con conocimiento de causa. "Estamos ante un producto financiero complejo más. Muy parecido a los Valores Santander y en línea con las preferentes.
El problema, como en todos, se encuentra en la “colocación” a clientes minoristas
Tres años después tenemos nuestra primera sentencia ganada en reclamación de acciones del Banco Popular.